martes, 12 de octubre de 2010

CRÍTICA DE DISCOS: Interpol - Interpol (2010)


Importante paso atrás y enorme decepción. Eso es lo que se me viene a la cabeza tras la primera escucha y tras sucesivas oportunidades que le he dado al disco. Si Interpol era uno de esos grupos indie colocados en la "pole position" para llegar a ser una de las bandas más grandes, éste su 4º álbum no ha sido más que una auto-zancadilla para su progresión. Porque después de unos 3 primeros álbumes tan sustanciales (aunque cabe decir que cada uno ligeramente era inferior al anterior) éste álbum homónimo "Interpol" (2010) es toda una mancha negra para su expediente.

Todos sabemos que Interpol no son un grupo al uso, su estilo oscuro, tétrico, barroco y en ocasiones recurrente al patetismo, no les hace ser un grupo fácil de asimilar a la primera. Continúan fieles a su oscuro y ochentero estilo post-punk y rock revival, pero es fácil darse cuenta de que se han quedado bien secos de ideas. A parte de que la sensación de autoplagio es recurrente durante todo el álbum, algunos temas son excesivamente recargados, siguiendo la línea de las últimas canciones de su último álbum "Our Love To Admire" (2007). Muchas de ellas son composiciones muy pobres, excesivamente largas y aburridas que recurren en exceso al patetismo (la voz del cantante Paul Banks todavía acrecenta más esa sensación) como Summer Well, la muy parecida al peor estilo de los Muse actuales Always Malaise (The Man I Am), All Of The Ways o The Undoing especialmente. Para hacernos una idea, hay escasamente 3 temas que podrían entrar o compararse con el nivel de los que contenían sus 3 primeros álbumes.

Cabe decir que porque estos chicos talento tienen, no todo es negativo en este disco, pero sólo hay 3 temas que tengan un buen nivel y que sean salvables, y eso visto las espectativas es muy pero que muy escaso. Todo lo salvable lo encontramos en la cara A del álbum, con un buen inicio con Success (un tema marca de la casa, fresco y que guarda la esencia de sus grandes temas pasados), la muy buena Memory Serves (sónicamente muy parecida a su álbum debut en 2002 "Turn On The Bright Lights"), el single Lights (la mejor del álbum, un misterioso increscendo fantástico que alcanza el nivel de los mejores Interpol) y aquí también podríamos colocar al otro single Barricade, que tras un inicio espectacular y prometedor (los primeros 30 segundos son geniales) se va estropeando progresivamente para convertirse en un tema vulgar y en lo más mainstream del álbum. Siendo benevolentes de la cara B sólo podríamos indultar a la semi-épica y con toques electrónicos Try It On, pero tampoco es ninguna maravilla.

En fin, decepción enorme y numerosas críticas recibidas por la prensa indie (Pitchfork lo maltrata con un 4'6 de valoración), que sumado al abandono de la banda una vez terminado el disco de su bajo Carlos Dengler añade un aire de incertidumbre al futuro del grupo. Por suerte su directo continúa siendo de un nivel notable, los pude ver en París de teloneros de la Gira de U2 y cabe decir que los nuevos temas en directo los defendieron solventemente.


NOTA FINAL: 4'75.


Escucha su nuevo álbum homónimo "Interpol" en Spotify.


Lights



Memory Serves



Success



Barricade

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